La esencia de Judy Garland

De la suite del prestigioso Hotel Ritz al consagrado teatro Lope de Vega llega, desde el 1 al 4 de marzo, ‘Al final del arco iris’ de Peter Quilter.

‘Al final del arco iris’ es una divertida pero trágica obra que retrata la explotación de una niña condenada desde su infancia al éxito. Jury Garland fue un hito de los años 50 quien, además de madre y esposa, fue una excelente actriz y cantante. Prueba de ello es su larga trayectoria artística y musical que recoge, entre otros permios, el Globo de Oro, el Oscar y el Grammy.

La obra de Quilter dirigida por Eduardo Bazo y Jorge de Juan se representa en Londres, en los últimos días antes de su muerte, donde Garland tenía contratados una serie de conciertos. Entre el Ritz y la sala Talk of the Town se desarrollará un profundo y emocionante entramado que desembocará de lleno en el corazón de Judy.

Además del exquisito vestuario elaborado por la diseñadora Yvonne Blake y el entablado musical del pianista José Manuel Villa Cañas, maestro de Mauro Muñiz, a esta obra no le podía faltar el destacable compendio de las canciones más memorables de la autora, entre las que se incluyen Somewhere over the rainbow, Get Happy, For once my life, representadas en directo por Natalie.

Natalie Dicenta, que representa el papel de la mítica Garland, se siente orgullosa de volver a Sevilla tras su anterior interpretación, ‘Los persas’. Para ella es un honor representar el papel de esta actriz y cantante a la que define como una mujer fuerte, vital y "clown" en los momentos más inesperados.

En esta pieza, Judy Garland paseará por el teatro acompañada de dos personajes masculinos caracterizados, comenta Natalie, con los dos tipos de hombres que la acompañaron siempre. Aquellos que “pretendían sacar lo máximo de ella y convertirla en una fábrica de dólares, y los que la querían para ella, para que descansara y viviera en paz”. Así, Nacho López se mete en la piel de Mickey Deans, quinto marido de la artista, y Mauro Muñiz interpreta a Anthony, pianista y fiel amigo que siempre le acompaña.

Natalie rememora a la “querida y admirada Whitney Houston” quien, como Jury Garant y muchos más, “han sido víctimas de la presión a la que la industria somete a los jóvenes talentos”. “La vida de Garland fue una montaña rusa de emociones”, y halaba la figura que le ha tocado interpretar.

Reconoce haberse metido de lleno en la piel de la actriz y buscar en ella la esencia de aquello estaba “fuera del show”. Le interesa del personaje su parte como mujer "dinámica y jefa" con el don de ejercer “talentos multidisciplinares” y donde “a pesar del poderío económico, la libertad y autonomía real no llegaba nunca”.

Para Natalie, conocer a July y adentrarse en todo el proceso creativo ha sido un placer que le ha enriquecido como persona y mujer, y del que espera seguir creciendo y amamantándose por mucho tiempo más.

Natalie Dicenta asegura un espectáculo mágico colmado por el esfuerzo y las ganas de grandes talentos que han conseguido plasmar la belleza de una historia opaca y de la que poco se conoce. Una obra que invita a disfrutar y palpar emociones a través de la belleza de acunar la palabra y la musicalidad sobre las tablas de un teatro.